Inconsciente

jueves, 9 de diciembre de 2010

Somos Primates » Arte innato (1)

Bueno. Parece ser que ni tan siquiera en la expresión de una mente creativa somos los únicos "bichos" capaces de manifestarla.
A mí me divierte ver cómo por una parte la naturaleza y el conocimiento mayor de la misma nos destrona de este lugar en el que sólo nosotros nos hemos situado y, por otra, para mí la más importante, resulta que inteligencia, creatividad y comprensión son parte de la naturaleza y no ni un hecho aislado ni accidental.
¿Existe una evolución natural no sólo hacia la complejidad sino hacia una inteligencia superior? Yo diría que sí.
Somos Primates » Arte innato (1)

miércoles, 27 de octubre de 2010

Preguntar “para qué”

Uno de los rasgos principales de la terapia Gestalt es plantearse preguntas de forma distinta a la tradicional. La primera y más básica es el “cómo”. La manera más típica de comenzar la sesión es preguntándole al paciente cómo se siente.
 En mis tiempos de aprendizaje se me ocurrió que bien podía escribirse un libro titulado “Qué dice usted después de decir ‘cómo’”, parafraseando el título del famoso libro de Eric Berne, el creador del Análisis Transaccional, “Qué dice usted después de decir ‘hola’”. Eso mostraba mi desconcierto ante la salida abierta que le dejaba al paciente. Imprevisible. ¿Cuál podía ser mi segunda pregunta si ignoraba lo que vendría a continuación como respuesta?

 La Gestalt no funciona como un árbol de alternativas, de blancos y negros. Por tanto, una cualidad indispensable para ser un buen terapeuta es la capacidad de contacto que se tiene con el otro, como se dice en Psicoanálisis. Eso y un entrenamiento a fondo junto con un proceso personal muy bien hecho. Que, por cierto, nunca se acaba, algo que se ha podido observar perfectamente en la serie “En terapia”, una de las mejores series televisivas que se han producido jamás.
Hoy aparco ese tema del cómo y me voy a una corrección muy importante que estableció también Perls respecto al valor de la pregunta “para qué” sobre el tradicional “por qué”.
El ‘por qué’ enseguida nos conduce hacia la racionalización, la búsqueda de causas, y de eso sabemos demasiado, tanto que ni cuenta nos damos de las trampas que hacemos. Racionalizamos hasta lo más absurdo. Lo que mucha gente desconoce es que la racionalización es un sistema de defensa o se crea a partir de él. Necesitamos explicaciones ante un mundo de incertidumbres que nos supera.
Nos lleva a las justificaciones, a buscar razones para todo cuanto hacemos. ¿No existen esas razones? Por descontado que sí. Lo que ocurre la mayoría de las veces es que las razones auténticas van más allá de las simples explicaciones que damos y con las que argumentamos. Sistema defensivo.
Chiste gráfico de Majofa
El ‘para qué’ es muchísimo más interesante. El ‘para qué’ no va a la causa sino a la finalidad.
Una hermana mayor le dice a la pequeña que su padre, ya muerto desde hace mucho tiempo, estaba senil en los últimos años de su vida y no tenía control de las funciones más básicas (era su padrastro). La pequeña no lo recuerda así y se siente sorprendida y confusa.
En terapia esa chica, O., lo comenta con su terapeuta. La estrategia de la confusión que utiliza su hermana mayor le es de sobras conocida y protesta –evidentemente dolida- por esa nueva discrepancia en los recuerdos de una y otra. Los recuerdos sobre los últimos años de su padre de O. son los de una persona lúcida, quizás algo ausente al final pero que seguía leyendo el periódico, releyendo un par de libros favoritos, emocionándose con su equipo de fútbol, nada más.
La terapeuta pone el dedo en la llaga: “¿Para qué te ha dicho eso tu hermana?”.
¿Qué objetivo perseguía la mayor, digamos M.,  al deformar la imagen del padre que tiene la pequeña? O. lo advierte enseguida y reacciona. Más allá de saber quien tiene los recuerdos falseados –alguien los tiene, el padre/padrastro estaba senil o no lo estaba-, la cuestión que importa es el propósito del comentario, de ese ataque a la imagen del padre.
Por su historia O. sabe muy bien el clásico rechazo de su hermana hacia “el intruso” que le “robó” SU madre, el odio que años después de muerto M. siente hacia aquel hombre que la había desplazado, según ella lo vivió. M. sigue atacando la figura odiada y queriendo destruir la unión natural que O. siente hacia su progenitor. Cuando aparece un recuerdo positivo hacia el padre éste ha de ser destruido como sea.
El tema fue bien encarado. No importaba tanto cuál había sido la realidad entonces y quien llevaba razón sino darse cuenta –otra cuestión fundamental en la Gestalt el “awareness” junto con el "insight"- qué había pasado entre las dos hermanas en aquel momento, cuál era el mensaje subyacente que M. hacía llegar a O. ¿Para qué M. quería transmitirle esa imagen caduca del padre a O.?
Preguntas como: ¿Para qué evitas las confrontaciones? ¿Para qué nunca acabas los proyectos que emprendes?
Si en esa última pregunta preguntamos el por qué, saldrán mil justificaciones. El para qué crea como una disonancia, como si te hubieran preguntado mal porque no es la pregunta que esperas. Viene el desconcierto y el terapeuta puede ayudar con alguna intervención que le ayude a la persona a entrar en contacto con sus motivaciones y, mejor aún, con sus miedos. ¿Realmente quiere acabar lo que empieza? ¿Para qué se propone algo que no terminará? ¿Cómo es que siempre suele ponerse en esa situación tan frustrante y que conlleva tanta decepción?
La importancia del ‘para qué’ es inmensa y en todos los campos. Finalidad, objetivos, motivación, averiguar qué es lo que pretendemos obtener con nuestra conducta. A dónde vamos; y de ahí también saldrá finalmente el conocernos mejor a nosotros mismos, bajando de esa mente explicativa y poniéndonos en contacto con todo nuestro ser.

jueves, 7 de octubre de 2010

Saludo y breve presentación

Un breve saludo para comenzar y lanzar una propuesta a los amigos.
¿Cuál es el tema con el que os gustaría que comenzara este blog? ¿Cuál es la primera pregunta que os viene a la mente?
En Psicomón hablaremos de psicología en general, ciencias del comportamiento, escuelas y técnicas de psicoterapia, antropología, algo de sociología, historia de las civilizaciones, lingüística, aprendizaje, de una manera asequible, ligera y rigurosa al mismo tiempo.
Así que, repito, ¿por dónde queréis que empecemos?